Nada más emocionante que llegar con un nuevo integrante a casa. Lo primero que haces es mirar su carita, encontrar un nombre que lo identifique y grabar una hermosa placa con su nombre para asegurarte de que siempre pueda regresar, a muchas mascotas les encanta pasear o salir a tomar sol a la vereda y prepararte para un improvisto, es lo mejor que puedes hacer.
¡Ya es un integrante oficial de la familia! Ahora, manos a la obra para preparar el espacio y disfrutar de una convivencia plena. Así como tú tienes tu comedor, elige un sitio del hogar que funcione cómo el suyo, de preferencia lejos de la cocina para que no se distraiga ni se malacostumbre. Ponle sus recipientes de agua y alimento siempre en el mismo lugar, los platos recomendables son los de acero inoxidable, porque son duraderos, resistentes, de fácil limpieza y además, no absorben olores.
Si el nuevo integrante es cachorro, te recomendamos darle el alimento indicado para su edad. Tiene ingredientes que le brindarán un crecimiento sano. Puedes investigar qué alimento o croquetas le daban antes de llegar a casa y darle el mismo los primeros días para que pueda digerir el cambio. Luego, puedes ir reduciendo la cantidad del viejo y aumentando la del nuevo de manera gradual.
Tu mascota también necesita un baño para hacer sus necesidades y mientras lo educas, puedes usar sabanillas y toallas húmedas de OK Pet. Colócalas en su baño después de que coma y beba, pero atentos, en caso de que comience a olfatear a su alrededor, déjalas cerca hasta que haya hecho sus necesidades. Y si lo hace bien, abrázalo y acarícialo cómo premio. ¡Él se lo merece!
Prepara su camita bien cómoda, para que tenga su lugar para ir a dormir. Puede ser una canasta o una cobija, cualquier opción es buena, lo importante es que identifique el espacio cómo suyo y que se acostumbre a él, para eso coloca una botella de agua tiba.
Recuerda que dándole su propio espacio y, sobre todo mucho cariño, se sentirá muy feliz en su nuevo hogar.